Viólame la mente, que eso me pone
El humo no es más que el recuerdo constante de que nos estamos consumiendo a cada calada

martes, 26 de enero de 2010

Solo odio a una persona de corazón y es a mi misma

Amanece, las lagrimas de hielo cubren tu ventana -que bonitos quedan los árboles de blanco-enciendes la luz, olvidas tu pesadilla -esa que se repite desde hace más de 3 semanas- piensas en la operación -mal- piensas en él -mal, muy mal- replegas los sentimientos a una cloaca para dejar que se pudran y se descompongan y tiras del resto de tu cuerpo hacia el instituto-vacio , tan vacio como yo ,porque no esta él- te deslizas fundiéndote con la nieve hacia el autobus -hace tanto frio en el exterior como en tu corazón-.

Llegas al instituto. sonries, ries las gracias de tus compañeros, tan tranquila tras tu escudo, casi parece que eres feliz, sacas un libro -primer error- el libro habla de amor -segundo error- , no deberías leer , te dices a ti misma, pero las palabras volvieron a atraparte. Leer el lo único que evita que te sientas sola -y eso es lo que hace que lo este entre tanta gente- .Te preguntan que te pasa ,niegas en silencio, te maldices a ti, a tu idioted, odias ser tan cándida -odio quererle-. Evitas pensar, alguien menciona san Valentin -tristeza- hablan de sus planes -un escalofrío recorre mi espalda y mi mente se llena de quirofanos- .

Aguantas como puedes, huyes a tu casa, pero ni si quiera ahi estas a salvo de ti misma

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